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Durante la época de los 80´s y 90´s, en la ciudad de Guadalajara se encontraba una famosa cadena de helados que ofrecían una gran variedad de sabores, además de dejar un sin fin de recuerdos a los tapatíos.

Los Helados Bing, nacieron en la Perla Tapatía y fue fundada por el empresario de origen Cubano-Estadounidense Adolf B. Horn, quien nació en La Habana, Cuba, en donde vivió unos años para posteriormente mudarse a Estados Unidos, en donde estudió la secundaria y la preparatoria.

En su adultez y luego de que manejara las empresas de su padre, Horn inició a trabajar en el Departamento de Estado de Estados Unidos durante la etapa de la Segunda Guerra Mundial, iniciando en la diplomacia, fue a través de eso que en el año 1958 que Adolf Horn llega a México, convirtiéndose en el cónsul general de los Estados Unidos en la ciudad de Guadalajara.

Luego de jubilarse él y su esposa de nombre Lina Bingham Horn, decidieron radicar en Guadalajara, debido a que se habían enamorado de la ciudad, siendo para 1963, cuando Horn decide iniciar una nueva empresa del sector heladero, debido a que en el país aún no se consolidaba.

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Fue así que nació Helados Bing, en honor a su esposa cumpliendo sus sueños de ver su nombre “en las luces”. El 20 de septiembre del año 1965 abrió sus puertas la primera heladería que ofrecía 17 sabores únicos y diferentes, ofreciendo una gran variedad a las y los tapatíos.

Luego de esto los Helado Bing comenzaron a tener un gran éxito, y según las leyendas locales a los dos días de la apertura tuvieron que cerrar debido a que los clientes habían arrasado con todo el producto.

Posteriormente, fueron abriendo tiendas en otras partes de la República, esto ante el éxito de su precio, sabores, y colores tradicionales de blanco y rosa, así como el típico carrusel que caracterizaba las heladerías.

Luego de 18 años de estar consolidada como una de las mejores heladerías de México, en 1983 Horn Stevens decide retirarse del mundo de los negocios, pues su esposa había enfermado de manera grave, por lo que vendió la heladería para dedicarle más tiempo a Lina. Cabe destacar que para ese entonces, ya contaba con 16 sucursales distribuidas en todo México.

Posteriormente sería el empresario mexicano José Luis González González quien compró la cadena de helados, asimismo, más adelante también fundaría la empresa de Helados Holanda.

El nuevo dueño de Helados Bing no permitió que Horn se alejara del negocio, pues lo convirtió en consejero de la empresa, y juntos lograron, para 1995, tener 600 tiendas en todo México.

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La implementación del Tratado de Libre Comercio a México, los Helados Bing comenzaron a tener problemas con la empresa en 1995, por lo que solicitaron apoyo de empresas Unilever, la cual ya contaba con diferentes marcas en el país.

Poco a poco el conglomerado fue abarcando gran parte de los Helados Bing, hasta dejar a José Luis González con solo 30 tiendas en 1998, de las 600 que llegó a tener.

Tras el cierre y afectación, González y Horn decidieron emprender un nuevo negocio de helado, de nombre Dolphy en honor de Adolf, en el año de 1999. En la actualidad aún existen algunas sucursales que siguen siendo parte de la cultura tapatía. Por su parte Adolf Horn murió a los 95 años, a mediados de la primera década de los años 2000.

¿Recuerdas las Heladerías Bing? ¿Comiste algún helado? ¿Tienes alguna historia por compartir de la heladería? Compartenos tus recuerdos.