¿Qué son y cómo funcionan los Fondos de Inversión?
noviembre 23, 2022
noviembre 23, 2022
Redacción
Un Fondo de Inversión es un patrimonio conjunto conformado por recursos de diferentes aportantes. Los partícipes pueden ser personas físicas y/o jurídicas. Hablando sencillamente, se trata de una cantidad de capital brindado por distintas personas o empresas. De un pozo común compuesto por aportes individuales que se expresan en cuotas.
Los fondos tienen un plazo determinado de inversión. El valor de las cuotas varía en función del éxito o fracaso de la misma. Y de cómo se comporten los mercados en los que participa. En ese contexto, las ganancias y las pérdidas del Fondo dependen de sus acciones estratégicas. El fondo puede invertir en diversos instrumentos financieros, como deuda, acciones, mercado inmobiliario o desarrollo empresarial. Cuestión que será definida por el reglamento interno.
El pozo recaudado por el Fondo de Inversión ofrecidos en mercados en linea queda expresado en cuotas. Los montos, series y cesiones de éstas son determinados por el reglamento interno del Fondo de Inversión. Deben tener el mismo valor y las mismas características. Y pueden canjearse por cuotas de otra serie del Fondo. Siempre cumpliendo con las normas y formalidades de su correspondiente reglamento.
En Chile, las inversiones de este patrimonio integrado pueden realizarse vía online en plataformas reconocidas y respetables como Mercadosenlinea.cl. Las transacciones de los valores y bienes que lo conforman están enmarcadas y regidas por la Ley N° 20.712, Ley Única de Fondos. Y son administradas por una sociedad anónima especial que maneja los recursos de terceros denominada Administradora General de Fondos (AGF).
Los Fondos de Inversión pueden ser rescatables y no rescatables. Los primeros les permiten a los aportantes recuperar íntegra y permanentemente las cuotas. Y pagarlas en un plazo de entre 11 y 179 días. Mientras que los no rescatables no siempre tienen ese recupero. Y de tenerlo, pagan esas cuotas en términos mayores a los 180 días.
Dentro de un Fondo de Inversión no rescatable las cuotas deben registrarse en una bolsa de valores extranjera o chilena. En ambos casos, aprobada por la Comisión para el Mercado Financiero (CMF). De esta manera, generan y participan de un segundo mercado.
Este tipo de fondos debe contar con al menos 50 aportantes permanentes. A excepción de aquellos en los que participe un inversionista institucional. En ese caso, no rige el número mínimo de aportantes. De igual manera, tiene que contar con un patrimonio de por lo menos 10.000 unidades de fomento. La moneda teórica UF se actualiza según la inflación, por lo que no pierde valor.
Los Fondos de Inversión pueden volcar su capital en diversos instrumentos financieros, nacionales o internacionales. El destino de la inversión depende de la cantidad de activos y de las características del fondo, definidas y detalladas en su reglamento interno.
En cuanto al riesgo, vale aclarar que aportar a diferentes fondos de inversión no siempre disminuye los riesgos. Con frecuencia, en ese escenario de aparente diversidad los partícipes de fondos se sienten protegidos de los vaivenes del mercado. Pero lo cierto es que, si los fondos son múltiples pero iguales, el riesgo es el mismo. Porque en ese caso ya no existe una diversificación real.
Los fondos que invierten a nivel nacional son sensibles al riesgo país, al cambiario, al de liquidez y al riesgo de tasa de interés. Aquellos que invierten sus activos en el mercado internacional están atados a los cambios que sucedan a ese nivel. Serán afectados por el contexto económico, financiero, político y fiscal del país en el que depositan sus recursos.
Las participaciones de los fondos privados no están abiertas al público. Son limitadas y administradas por sociedades anónimas cerradas. Al ser privados, permiten una mayor flexibilidad para cautivar capitales de varios inversores y tipos. Esta es la razón por la que son muy adoptados por emprendimientos emergentes e innovadores.
Los aportantes de los fondos de inversión privados no pueden ser más de cuarenta y nueve. De exceder ese número de partícipes, el fondo queda expuesto a las normas que se aplican a los fondos públicos. Debe comunicar el exceso y adaptar su reglamento interno a esa normativa.